martes, 21 de diciembre de 2010

LUCIA de Rosa María Gomez Esteban

Antes de empezar a presentaros los cuentos FINALISTAS del concurso literario Alberto Nestor (dia 2 de enero), vamos a colgar este cuento enviado por ROSA MARIA GOMEZ ESTEBAN y que por el motivo que sea no entró en el correo del baul de las letras, por lo que le fue imposible participar. El cuento es muy bonito y....pero mejor lo leais...¡lastima no haya concursado!


En la solemnidad de la noche, Lucía se estremece en su cama. Se agita en su lecho ardiente en un estado de sopor inquietante. Este letargo la eleva a entresueños indómitos, llevándola a su antojo a un mar de emociones, gobernadas por la efusión de un calor ávido de amor, de deseo, de placer…


El delirio la embriaga por completo, el anhelo anida entre sus muslos ardientes, ahí donde el fragor de la tempestad enviste estrépito. Su respiración es entrecortada y jadeante meciendo sus pechos turgentes como aquel barco en el vaivén de las olas. El rocío de su piel resbala por su cuerpo circunscribiendo su esbelta silueta al son del pálpito acelerado de su corazón. Lucía, en la inmensidad de la noche, arde de pasión.

La ventana está abierta, es una noche cálida de finales de agosto, la fragancia suave de las flores del jardín, invade la habitación y un hálito de brisa fresca acaricia la piel de Lucía.

Con la excitación del ensueño, Lucía busca con su mano a Bruno al otro lado de la cama. Entre la inconsciencia y la consciencia, se torna hacia él susurrándole palabras con deseo. Quiere su calor, su pasión, su fuerza. –Bruno, Bruno– balbucea. Remueve la sábana y se acerca a él con el movimiento torpe de un cachorro. Alarga sus brazos para abrazarle. Su piel ardiente se templa, sus ojos se entreabren mientras se desvanece el estado de zozobra. – Bruno, Bruno –. Se despierta. Durante unos segundos, se queda mirando hacia él, hacia su lado, no hay nada más que su mirada, no hay tiempo ni espacio, no hay consciencia, sólo su mirada. En ese tibio instante, un halo de verdad fragante golpea el corazón de Lucía. Ahí donde brotaba el fervor, ahí donde la pasión emanaba, se torna un gélido desierto. En la infinidad de la noche, Lucía se hace realidad. El lado frío de la cama, ahí donde Bruno había yacido con ella tantas veces, se vuelve soledad desde aquel invierno traidor que se llevó la vida de Bruno. En la quietud de la noche, Bruno no volverá.

3 comentarios:

Pako dijo...

ALgunas personas se acercan a decirme que ellos habrían puesto otro orden entre los ganadores.
Propongo que una vez publicados todos los relatos finalistas y sin desmerecer a los del "reconocido prestigio" hagas una especie de votación popular solicitando, por ejemplo, 1º, 2º y 3º para el populo, haciendo así una clasificación popular ya que como se sabe, a veces el gusto del populacho no coincide con el de las elites.
Pako

acuario55 dijo...

Pienso que es muy difícil decidir que relato mereció ganar.
Siempre habrá alguno que por un motivo u otro toca tu corazón y te resulta el elegido, pero vaya por delante que todos han sido escritos con ilusión y merecen ser leídos por todos los compañeros, y seguro que al leerlos se darán cuenta que ellos también podían estar ahí, y seguro que en el próximo concurso en lugar de 43 somos muchos más.

administrador dijo...

...todo se andará. TRANQUILIDAD.

A partir del dia 2 se empiezan a publicar los cuentos finalistas, y una vez leidos...